Viene la vainilla a mi jardín#

Poema del 25/ 11/ 2017

Entre el otoño y el invierno, prefiero el otoño. Entre el verano y la primavera, escojo la primavera, pero no la de ahora, la de antes. Aquel jardín de rosas y lirios, jazmines, vainilla y azahares. La primavera nos embalsama con su festín, pero, no ha todas las personas les viene bien la primavera, el motivo, las alergias, y otros que prefieren el frío y  estar junto a la chimenea . Otro punto importante es que al cambiar de estación y horario el cuerpo se tiene que acomodar al nuevo lapso, y hasta que no nos acostumbramos nos sentimos más cansados, y de ahí la astenia primaveral, por el aumento de luz, y porque los días son más largos gracias al Sol que se muestra más generoso. Nos jugamos un papel importante, porque en nuestro ánimo, está el poder proyectarse, adaptarse a la bella estación, y no enfermar.

Se largan los fríos del alma,

brotan heliotropos en primavera,

viene la vainilla a mi jardín,

me voy sintiendo entera.

Sobre el lid persigo la calma,
de la floresta en la llanera.
El suelo sin el limo ruin
para volar donde quiera.
El amanecer en mi alma,
y en mi palma una quimera.
Que ya llegará el fin,
y me robara la fiera.
Allí donde no hay festín,
sobre una triste ladera,
en el páramo de su confín,
donde no hay vera con vera.

Se largan los fríos del alma
vienen los aromas de romancera,
su orujo en mi jardín,
me embalsama la lumbrera

Poema del 25/ 11/ 2017